Torpe!
Desde pequeñita siempre he sido despistada y un poquito torpe, soy de las que por mucho que intente andar sin hacer ruido siempre encuentra algo por el camino con lo que se tropieza.
Llego a tal extremo que una vez me fui a trabajar con una bola enooooooorme arrugada de cinta de pintor pegada en el casco de la moto.
¿¿Como es posible que no me diera cuenta al ponerme el casco?? menos mal que un amable conductor se paro al lado mío en un semáforo para señalarme el casco con una media sonrisa en la boca.
Lo bueno de haber sido siempre así es que ya no me da vergüenza este tipo de cosas, me despego la bola del casco, le digo gracias al conductor y continuo hacia el trabajo sin importarme que todos los que estaban en el semáforo se estuvieran encanando de la risa a mi costa.
En fin! Tantos años igual es lo que tiene! Este tipo de historias son de las que recordare toda mi vida...mas que nada porque los amigos se encargan de ello constantemente!!
11 comentarios:
Buen estreno.
La reiteración hace que nos volvamos despreocupados. Y lo importante deja de serlo por mera monotonía.
Yo no te hubiese avisado, pero mi sonrisa hubiese superado la medianía con creces ;-)
Ahí están los amigos para sacar a la luz estos momentos. Siempre lo hacen, cuando hay gente nueva especialmente...
Juaaaaaa, lo que más gracia me hace es imaginarte quitándote la bola de la cabeza como si nada, como el anuncio de la maceta en la cabeza.
- Esto, Sortilegio, hazte un poco así, que tienes una gran bola de cinta adhesiva en la cabeza.
Era un casco con moño, ¿no?
Al menos el conductor consiguio contenerse lo suficiente para decirtelo, yo no sé si hubiera podido, jejeje.
Uy! Y lo que te queda, si tú no tienes buena memoria, tranquila, que te lo recordaremos los demás. jejejeje!
juuuuuaaaaa juuuaaa, hombrefrio...desde luego lo tuyo es mucho peor jajjaja
Me quedo con lo de los amigos, recordándotelo constantemente... :D
Y hubiera matado por verte en el semáforo :D
qué graciosa... yo en vez de torpe y despistada soy un poco bruta... la delicadeza brilla por su ausencia... y sí, mis amigos se ríen constantemente... ay...
Algun que otro despiste siempre nos mueve la sonrisa.Me habiera gustado sacarte una foto!
Saludos.
Yo de niña era terriblemente vergonzosa, de hecho, aunque no lo parezca, según el día que tenga lo sigo siendo. Pero de tantas cosas como me han ido pasando y de tantas veces que he hecho el ridículo, llega un momento en que te inmunizas ;)
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