Manos negras
Este miércoles un desconocido debió estar todo el día acordándose de mi .... y de toda mi familia.
Al salir del trabajo cogí la moto como todos los días para volver a casa, pero con el calor que hacia iba medio empanada y se me olvido quitar el candado que siempre pongo entre los radios de la rueda trasera.
Me di cuenta cuando, una vez arrancada la moto y quitada la pata de apoyo, vi que la moto no tiraba, giro la cabeza y MIERDA! al girar la rueda el candado se había quedado atascado entre la cubierta de la rueda y el guardabarros trasero.
Debido al atasco no podía poner otra vez la pata de apoyo por lo que, sin poder soltar el manillar de la moto para que no volcara, me puse a gritar como una loca a un chico-fuerte-con-pinta-de-simpático que pasaba por la acera, se acerco con sus relucientes gafas de sol y sus libros en la mano hasta donde estaba.
- ‘Por favor! Necesito tu ayuda!’ –le dije- ‘¿Podías sujetar el manillar de la moto mientras yo intento quitar el candado?’.
- ‘Por supuesto!, no te preocupes’-me contesto.
Intente desatascar el candado pero estaba totalmente metido a presión, le di golpes, menee la moto, veía de reojo que el chico-fuerte-con-cara-de-impaciente se empezaba a poner nervioso, así que le dije:
-‘¿Probamos al revés? Yo sujeto el manillar y tu como tienes mas fuerza intentas desatascar el candado’.
Halagado por el piropo el chico-fuerte-otra-vez-simpático se puso a maniobrar con el candado.
Si yo tire fuerte él lo hizo mas, si yo menee la moto él casi la tira a suelo, como ni aun así podía sacarlo tiro sus libros al suelo para poder trabajar mejor, así que con las dos manos tiro bruscamente del candado y con el meneo sus relucientes gafas de sol se cayeron a tomar por culo.
Él las aparto de un manotazo y metió las manos por debajo del guardabarros, y como la moto no la tengo muy limpia que digamos se le quedaron negras...gracias a dios junto con sus manos negras saco también el candado.
-‘Muchísimas gracias! Menos mal!’ –le dije-
Él se secó el sudor de la frente con la mano, cogió sus antes-relucientes-gafas y sus libros del suelo y casi sin despedirse se fue.
Y así es como vi marcharse a manos-negras-cualquiera-se-atreve-a-decirte-que-te-has-manchado-toda-la-cara-al-secarte-el-sudor.
Al salir del trabajo cogí la moto como todos los días para volver a casa, pero con el calor que hacia iba medio empanada y se me olvido quitar el candado que siempre pongo entre los radios de la rueda trasera.
Me di cuenta cuando, una vez arrancada la moto y quitada la pata de apoyo, vi que la moto no tiraba, giro la cabeza y MIERDA! al girar la rueda el candado se había quedado atascado entre la cubierta de la rueda y el guardabarros trasero.
Debido al atasco no podía poner otra vez la pata de apoyo por lo que, sin poder soltar el manillar de la moto para que no volcara, me puse a gritar como una loca a un chico-fuerte-con-pinta-de-simpático que pasaba por la acera, se acerco con sus relucientes gafas de sol y sus libros en la mano hasta donde estaba.
- ‘Por favor! Necesito tu ayuda!’ –le dije- ‘¿Podías sujetar el manillar de la moto mientras yo intento quitar el candado?’.
- ‘Por supuesto!, no te preocupes’-me contesto.
Intente desatascar el candado pero estaba totalmente metido a presión, le di golpes, menee la moto, veía de reojo que el chico-fuerte-con-cara-de-impaciente se empezaba a poner nervioso, así que le dije:
-‘¿Probamos al revés? Yo sujeto el manillar y tu como tienes mas fuerza intentas desatascar el candado’.
Halagado por el piropo el chico-fuerte-otra-vez-simpático se puso a maniobrar con el candado.
Si yo tire fuerte él lo hizo mas, si yo menee la moto él casi la tira a suelo, como ni aun así podía sacarlo tiro sus libros al suelo para poder trabajar mejor, así que con las dos manos tiro bruscamente del candado y con el meneo sus relucientes gafas de sol se cayeron a tomar por culo.
Él las aparto de un manotazo y metió las manos por debajo del guardabarros, y como la moto no la tengo muy limpia que digamos se le quedaron negras...gracias a dios junto con sus manos negras saco también el candado.
-‘Muchísimas gracias! Menos mal!’ –le dije-
Él se secó el sudor de la frente con la mano, cogió sus antes-relucientes-gafas y sus libros del suelo y casi sin despedirse se fue.
Y así es como vi marcharse a manos-negras-cualquiera-se-atreve-a-decirte-que-te-has-manchado-toda-la-cara-al-secarte-el-sudor.
miércoles, mayo 17, 2006 8:37 p. m.
8 comentarios:
jajajaja
jo, te pasa de todo... ;-)
Juaaaaa, pobre!
Por esto y por mil cosas parecidas hay que procurar no ser galán, ni simpático, ni dispuesto.
Ja,ja,ja!!!
Que bueno!!!
:)
Ostras que cosas más raras haces para NO ligar :o)
XDDDDDDDDDDDD
Sin duda se acordará de ti y de toda tu familia, no te quepa duda ;)
Jajajaja! Jajajaja! Me acabas de alegrar la mañana!! Un besazo!
jua jua jua, esas cosas sólo te pasan a tí sorti!! jua jua, hacía mucho que no te pasaba nada raro, jua jua
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